¿Qué es Un Canto de Esperanza?

Un Canto de Esperanza no solo es el nombre de la tercera versión de la Memoria Sonora para la Paz, es también el llamado que desde el norte del Cauca deciden realizar cerca de 300 artistas que viven en un territorio que se debate entre la incertidumbre, el miedo y el silencio, pero que, desde la cultura, el arte y el diálogo, han optado por resistir pacíficamente y por buscar cada día un futuro mejor.

El nombre es también un homenaje al inicio de este proceso, en la primera versión de la Memoria Sonora la tradicional agrupación Puma Blanca tituló así su canción y decidimos retomarla porque la Memoria no termina, es una constante transformación que invita a no dejar de creer, a no dejar de confiar, a no perder la esperanza.

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En el mes de marzo de 2023 artistas de Suárez y Buenos Aires, Cauca, nuevamente se dieron cita, esta vez lejos de su territorio por las condiciones del contexto, para grabar la tercera versión de la Memoria Sonora para la Paz.

Una Memoria Sonora, donde han quedado consignados los cantos y reflexiones sobre la resistencia por la vida y la paz de una cantidad cada vez mayor de artistas del norte del Cauca.

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+ 300 Artistas

Más de 300 artistas de Buenos Aires y Suárez y de las organizaciones comunitarias que anhelan que el país les escuche, que no quieren más indiferencia y que desean avanzar para que las niñas y los niños vivan en territorios de paz.

Disco

Este disco es una recopilación de la infinita creatividad y el saber musical de artistas del norte del Cauca y además, es una declaración de principios frente a los procesos de construcción de paz. Es la resistencia hecha canción. Es una respuesta contundente de cientos de personas, desde las artes, a los retos que históricamente han impuesto los problemas sociales y la violencia en este territorio.

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El proyecto en imágenes

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Manifesto

Hay un canto siempre escondido dentro de sí mismo. Hay palabras en medio del discurso y canciones que pueden ser escuchadas, aunque no sean dichas, hay un mensaje que se revela para quién quiere escuchar lo que habita debajo de la algarabía y en el corazón de un tambor.

Aquí hay más, mucho más de lo que a simple vista encuentran los ojos y oídos desprevenidos.

La Memoria Sonora arropa y descifra los silencios que pretenden las armas y contiene los alaridos de justicia y dignidad de un pueblo. Esta plataforma Memoria Sonora para La Paz, ha sido, es y debe seguir siendo, el espacio y la herramienta para que el país comprenda y atienda lo que el norte del Cauca está enfrentando. Es un repositorio del patrimonio cultural que niños y niñas deberán aprender, cuidar y reproducir para las generaciones futuras.

Aquí ha quedado consignado para la historia el clamor de comunidades dignas y sabias, la claridad y coraje que les habita, la valentía y el amor que guían a quienes han pasado por la Memoria Sonora, que ponen sonido, baile y poesía al miedo que quisiera imponer la violencia.

Aquí está una victoria de estas y estos artistas que cantan, tocan violines y tambores con una sonrisa en su rostro. Aquí están demostrándole a la juventud de su comunidad y del mundo, que hay en el arte no solo un camino y una alternativa, sino también, una tarea de inmensa responsabilidad para preservar el saber ancestral y contener el avance de una cultura de la depredación que amenaza con arrasar las costumbres, la alegría, la naturaleza y la tradición.

En esta Memoria Sonora para La Paz hay un canto evidente y uno escondido que se revela para quienes aman de verdad la vida y el territorio.

La Memoria nos constituye y la esperanza nos moviliza.

César López

En alianza con